El mecanismo de defensa de un otaku de núcleo duro en ‘First Dates’: “Hablar y hablar”

Javier es un otaku de núcleo duro, pero con un corazón blando y muy sensible, “con un corazón preparado para amar”. Trabaja de programar en un banco, estudió arqueología, pero vio que no tenía mucho futuro. En el amor ha tenido mala experiencia y ha estado seis años viviendo un amor no correspondido “esperas, esperas… Tienes esperanzas en ser la pareja, pero pasa el tiempo y hasta que no llega el día en el abre los ojos, no te das cuenta de que eres un imbécil”.

Le gustaría que su cita de ‘First Dates’ tuviera los mismos gustos que él, no cree que sea algo malo y no termina de entender que alguna vez le han rechazado por se fan del manga y el anime. Katia, su cita, siente que en el amor ha sido afortunada porque en las relaciones que ha tenido se ha sentido correspondida.

A Javier le ha parecido que su cita era una mujer muy atractiva y no ha dudado en decírselo nada más conocerla. Ella, sin embargo, ha visto a un chico mono, pero muy pequeño para ella, no busca a un hombre robusto, pero… Los dos son de la zona sur de Madrid.

Mientras comenzaban con el primer plató, los solteros han hablado de sus profesiones y Javier ha aprovechado que Katia trabajara en el mundo cultural para contarle que era arqueólogo. El soltero aprendió que el origen de todo está en el sur de África y le ha gustado mucho que su cita tuviera los rasgos de dicho país. Le ha vuelto a decir que le gustaba su pelo y su piel morena, pero ella ha sentido que sus técnicas para ligar eran “muy pobres”.

Katia no tiene ninguna pasión destacable, pero Javier tiene muchas y le ha comenzado a contar que le gustaba mucho la novela histórica, la fantástica, el manga, el anime… Le ha contado que era un otaku de núcleo duro, pero a ella le ha sonado todo a chino porque no entendía nada de ese mundo. Él le ha dicho que estaba nervioso, pero Katia estaba sintiendo que era un poco redicho y que no había vivido mucho “su mecanismo de defensa ha sido hablar, hablar”.

Javier ha sorprendido a Katia con su edad y le ha dicho que le habían llegado a echar 18 años. La soltera le ha dicho que a ella le pasaba lo mismo. Hablando de amor, el soltero le ha hablado de su amor no correspondido y ella ha tenido la misma sensación “cada uno es raro a su manera, pero creo que le falta vivir”. Javier está buscando un amor romántico y no ha dudado en decirle a Katia que podía ser ella porque “estoy viendo a la persona perfecta. El soltero busca un amor para toda la vida “que solo nos separe la muerte”.

El soltero ha seguido con el ritmo de la conversación y le ha dicho que no era de rollitos de una noche, que buscaba una relación formal y que le gustaría tener una niña porque sus padres siempre habían querido tener una niña, y es hijo único.

En el momento de la decisión final, él soltero se ha deshecho en halagos con Katia y le ha dicho que quería tener una segunda cita porque había estado muy cómodo a su lado, pero ella ha sido sincera y le ha dicho que podían ser amigos, pero que no quería una cita romántica porque le había faltado chispas.