'Diario de' comprueba cómo las ayudas destinadas a Lorca no llegan

cuatro.com 14/10/2011 14:52

Cinco meses después del terremoto de Lorca, los ciudadanos de la localidad murciana se quejan de que las ayudas no llegan. Después de tanta solidaridad y tantas visitas de los políticos, muchos de los 11.000 desplazados de sus hogares siguen sin recibir las prestaciones prometidas.

Mercedes Milá recorre los barrios más devastados por el seísmo acompañando a lorquinos indignados por el abandono que dicen estar sufriendo. El programa desvela por qué no se están cumpliendo las promesas hechas a los habitantes de esta ciudad devastada por la tragedia.

El equipo de ‘Diario de’ acude al campamento donde todavía permanecen decenas de familias viviendo en tiendas de campaña. Un campamento con unas medidas de seguridad muy cuestionables y que es tildado por algunos de los que allí viven como un “campo de concentración”.

La periodista, junto a un concejal del ayuntamiento, comprueba cómo dicho campamento tiene unas medidas de seguridad extremas y es testigo del secretismo que hay entrono a él. Mercedes Milá entrevista al Alcalde de Lorca que reconoce abiertamente que las ayudas están “durmiendo en la burocracia de las tramitaciones de los expedientes”.

Crueldad en las novatadas del inicio del curso universitario

La pasada semana varios estudiantes de Santiago de Compostela fueron víctimas de una cruel novatada. Los veteranos les rociaron con sosa cáustica causándoles graves daños en los ojos. Dos reporteras de Diario de

Ante la denuncia de una madre de un joven novato acuden a un descampado cerca de la Universidad Complutense y comprueban cómo los veteranos organizan novatadas a los recién llegados. Muchos de ellos son humillados con juegos aparentemente inocentes y otros son obligados a emborracharse y posteriormente son vejados por orden de los veteranos. Las reporteras son testigos de estas bromas pesadas que algunas veces pueden acabar mal.

Alquiler de piso a cambio de sexo

La crisis está provocando que mucha gente se aproveche de los más necesitados. En la red hay multitud de anuncios que atraen la atención de los que peor lo están pasando. Algunos son falsos trabajos y otros van más allá.

Una reportera del programa contesta a un anunció que reza: “alquilo habitación a cambio se sexo”. Se cita con el anunciante y descubre, que tras este reclamo, hay un negocio de prostitución encubierta. El hombre que ha puesto el anuncio lo que busca son jóvenes que hagan de “pornochacha” o lo que es peor, que se prostituyan para él. La reportera acude a su piso y efectivamente, este proxeneta tiene montado un negocio de citas y pretende llevarse el 50% de lo recaudado por las chicas.