Edu Soto se prueba a sí mismo en Desafío Extremo

cuatro.com 26/12/2011 22:33

Jesús Calleja decidió corroborar el dicho de: “quién ríe el último, ríe mejor”. Porque después de ver muchas parodias que el actor Edu Soto hacía de Desafío Extremo, quiso invitarle a realizar un desafío y ver si era capaz de escalar una montaña con el equipo del programa.

El reto pensado en un principio, tuvo que ser repensado sobre la marcha, porque Mongolia, las condiciones meteorológicas, los medios de transporte y “el gafe” de Edu Soto pusieron muchas dificultades al plan ideado por Jesús Calleja. Y los 4374 metros de altura del primero objetivo quedaron en menos altura para la escalada final, pero no en menos desafíos y diversión.

El viaje comenzó en Ulan Bator, donde Edu mostró su buen humor desde el primer minuto. Un poco de turismo cual “murcianico” en un mercadillo; lucha libre típica de Mongolia donde ni Jesús ni Edu se amilanaron; algo de conocimiento de la cultura, la vivienda y la gastronomía mongol, como las casas nómadas denominadas “Ger” o la leche de cabra con alcohol, que tanto costó tragar a Edu; y un paseo (por llamarlo de alguna manera) sobre un caballo de competición del Naadam (las olimpiadas mongolas) cuando Edu nunca había montado a caballo, fueron algunas de las actividades lúdicas antes de enfrentarse a la montaña.

Como el avión que les trasladaría hasta el Monte Khuiten fue cancelado por un temporal en la zona, Jesús Calleja no tardó en pensar un plan b para que Edu Soto no se librara del desafío. Desafío, que comenzó con la travesía en la furgoneta rusa que hicieron por todo Mongolia para llegar al desierto del Gobi.

Allí le esperaba un duro entrenamiento por las dunas a Edu, que logró culminar, pero acabó asfixiado. Y claro, con tanto cansancio acumulado, las noches en la tienda de campaña fueron todo un show. Y más que las noches, el levantarse a las 6 de la mañana para seguir con el viaje y la preparación para la escalada, cuando el cuerpo no respondía a Edu Soto y Jesús Calleja y sus caras eran todo un poema.

Pero después de coger otro avión que les acercó un poco más a su destino final y que les permitió hacer noche en un hotel para asearse y dormir en una cama una única noche, continuaron su camino para que Edu se enfrentara a la pared vertical donde realizaría escalada libre sobre granito.

Los primeros intentos fueron fallidos, y tuvo que ser el bueno de Jesús quién marcara el camino a Edu para ascender los 55 metros de desafío. Podría parecer una ascenso fácil, pero el propio Jesús reconoció que se trata de un reto muy técnico y complicado.

Por eso, Edu Soto no quiso defraudar, y con mucho esfuerzo logró subir a la cima.

No sabemos si volverá a intentar escalar algo, pero desde luego, superar el Desafío Extremo para un inexperto como Edu Soto, es todo un éxito. ¡Enhorabuena, Neng!