Viajar a Marte supone exponerse a la demencia crónica

Noticias Cuatro / Agencia 10/10/2016 19:59

"Esta no es una noticia positiva para los astronautas que se desplieguen en un viaje de dos a tres años a Marte" ha explicado el profesor Charles Limoli, encargado de realizar este estudio para la Universidad de California Irvine.

La exposición a las partículas espaciales puede conducir a una serie de posibles complicaciones del sistema nervioso central (hasta pueden persistir tras un largo tiempo después del viaje): disminución del rendimiento, déficit de memoria, ansiedad, depresión y problemas para la toma de decisiones. Muchos de estos síntomas pueden, incluso, agravarse a lo largo de sus vidas.

Para el estudio se utilizaron roedores que fueron sometidos a irradiación de partículas cargadas (oxígeno totalmente ionizado y titanio) en el Laboratorio de Radiación Espacial de la NASA y luego se enviaron al laboratorio de Limoli en la UCI.

Seis meses después de la exposición, los investigadores todavía se encuentran niveles significativos de inflamación del cerebro y daño a las neuronas. El análisis visual reveló que la red neural del cerebro se veía afectada por la reducción de las dendritas y espinas en estas neuronas, que interrumpe la transmisión de señales entre las células del cerebro. Estas deficiencias fueron paralelas a los malos resultados en las tareas de comportamiento diseñadas para probar el aprendizaje y la memoria.

Además, el equipo de Limoli descubrió que la radiación afecta a la extinción del miedo, un proceso activo en el cual el cerebro suprime asociaciones desagradables y estresantes anteriores, como cuando alguien que casi se ahoga aprende a disfrutar del agua de nuevo.

"Los déficits en la extinción del miedo podrían hacer que sea más propenso a la ansiedad, algo que podría convertirse en un problema en el transcurso de un viaje de tres años hacia y desde Marte."

Las personas que trabajan durante largos períodos en la Estación Espacial Internacional, sin embargo, no se enfrentan al mismo nivel de bombardeo con rayos cósmicos galácticos porque todavía están en la magnetosfera que protege la Tierra.

El trabajo de Limoli forma parte del Programa de Investigación Humana de la NASA. Investigar cómo afecta la radiación espacial a los astronautas y las maneras de mitigar esos efectos resulta crítico para una mayor exploración humana del espacio, y la NASA tiene que tener en cuenta estos riesgos, debido a sus planes para misiones a Marte y más allá.

Se están explorando soluciones parciales, como un rediseño de la nave espacial, donde incluir áreas con mayor blindaje. Además, los tratamientos preventivos ofrecen alguna esperanza.