Un hombre mata a su esposa y oculta el cadáver durante 11 años

Noticias Cuatro 06/06/2014 18:40

Noé Ramírez Roble, ante las evidencias, confesó a la policía el asesinato de su mujer con una palanca de hierro, según ha publicado el periódico mexicano Proceso.

El 18 de noviembre del 2003, Eva María Guerrero Cruz, de 31 años, visitó a su marido, Noé Ramírez Roble en el taller de mecánico que tenía.

La pareja tuvo una discusión y el hombre la golpeó repetidamente hasta que Eva María Guerrero quedó inconsciente. Noé Ramírez Roble decidió matarla y le propinó un golpe en la cabeza con una barra de hierro.

Echó el cuerpo de su mujer en la fosa en la que revisaba los coches y la cubrió con tierra. Poco después abandonó el local y contó a los que le preguntaron que le habían subido el alquiler.

El resto fueron todos mentiras. Al día siguiente contó a los parientes que su mujer se había ido a otra ciudad a tratarse una picadura de abeja y claro, como no regresó, el asesino fue a la policia de García, localidad mexicana, donde la denunció por abandono de hogar.

El 10 de mayo de 2008, el marido asesino, pagó a una mujer para que dejara un mensaje en el contestador telefónico como si fuera la fallecida. En el mensaje decía que vivía en EEUU y que estaba bien.

El mensaje solo fue escuchado por la hija que el agresor y su víctima tenían. Después Noé Ramírez Robles se encargó de borrarlo para que ninguno de los familiares pudiera detectar el engaño.

El pasado mes fueron localizados restos humanos en el taller donde cometió el asesinato. Los familiares sospecharon que eran restos de Eva María Guerrero y pidieron realizarle pruebas genéticas.

El asesino fue interrogado por la policía y terminó confesando todo. Este viernes, los restos de la fallecida serán enterrados.