Una segunda familia denuncia el trato a su hijo con autismo en el colegio de Getafe

Noticias Cuatro | Agencias 20/04/2018 08:34

Fuentes de la Consejería de Educación e Investigación de la Comunidad ha confirmado que la denuncia llegó hace unos días a la Inspección y que esta misma tarde hay una reunión con los padres, la dirección del centro pública y un miembro de la Inspección para abordar la situación.

Se trataría de la segunda denuncia que registra este centro, en el punto de mira después de que saliesen a la luz unas grabaciones donde se podían escuchar a trabajadoras riéndose y vejando a un menor de 8 años con autismotrabajadoras riéndose y vejando a un menor de 8 años con autismo, que ya no está en el centro. Sus padres le habían colocado un dispositivo en la ropa para captas las conversaciones tras comprobar un "cambio brusco" en su comportamiento, en principio ajeno a su enfermedad.

Irene Camacho es la madre de este menor de 10 años se enteraba de lo ocurrido por los medios y que, ante los periodistas situados en la puerta del centro, aseguraba que se había sentido "identificada", ya su hijo no quiere ir al colegio y creen que le ha podido pasar algo similar.

Al respecto, contó que lo encerraron con llave solo en una sala y que en alguna ocasión cinco auxiliares sujetaron al niño contra el suelo, lo que le parece "un maltrato en toda regla", aunque de momento no se han planteado denunciarlo por la vía judicial --ya está el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 con la denuncia penal de la primera familia--.

Según explicó Camacho, los profesores "decían que era lo habitual porque el niño estaba muy nervioso o con mucha ansiedad ya que les agredía". "El primer año en el colegio fue muy bueno pero el año pasado empezaron los problemas con muchos miedos y tenía un rechazo al colegio que no era normal. En unas ocho ocasiones le han tenido encerrado", afirmó.

También contó que su hijo lleva tres semanas sin acudir al colegio porque "no quiere venir" y en el centro "no pueden con él", por lo que se están planteando cambiarle. "No puede garantizar de que haya sido maltratado y me hubiera gustado también poner una grabadora, así que eso se va a quedar en duda porque mi hijo no me puede contar nada", concluyó.