Romney se impone por la mínima a Santorum en el 'supermartes'

cuatro.com 07/03/2012 08:07

Mitt Romney ha ganado por la mínima al ex senador Rick Santorum en el proceso de elecciones primarias y 'caucus' que el Partido Republicano de Estados Unidos ha celebrado hoy en la jornada conocida como 'supermartes'. El ex gobernador de Massachusetts ha vencido en cinco estados, incluído en el estado clave de Ohio, mientras que Santorum se ha impuesto en tres. Gingrich ha quedado descolgado de la lucha por la candidatura tras vencer solo en el estado de Georgia.

Romney ha ganado en Virginia, Vermont, Idaho, Massachusetts, donde fue gobernador, y en el estado clave de Ohio. De esta forma, suma un total de once victorias en la carrera hacia la nominación republicana para la Casa Blanca, con lo que mantiene su liderazgo y avanza hacia los 1.144 delegados necesarios para ganar la candidatura del partido. "Estamos sumando delegados para la convención y esto se ve bien", dijo Romney a sus partidarios en su estado natal de Massachusetts.

Por su parte, Santorum ha ganado en Oklahoma, Dakota del Norte y Tennessee, con lo que suma un total de siete victorias, incluidas las anteriores en Iowa, Colorado, Minnesota y Missouri.

A gran distancia de ambos está el ex presidente de la Cámara de Representantes Newt Gingrich, que ha sumado a su victoria del pasado mes de enero en Carolina del Sur la de hoy en Georgia, su estado natal. En último lugar queda el congresista por Texas Ron Paul, con el contador a cero.

El estado clave: Ohio

Con la mayor parte de los votos escrutados en Ohio, Romney ganaba con un 38 por ciento, frente al 37 por ciento de Santorum. Romney tuvo mejores resultados en con fuerza en las ciudades más grandes del estado y las zonas aledañas, mientras que Santorum se llevó las áreas rurales.

Loa sondeos a boca de urna mostraban que los ciudadanos de Ohio consideran que Romney tiene más posibilidades de vencer a Obama, pero creen que Santorum está más cercano a las preocupaciones de los estadounidenses promedio, que representan la mayor parte de los votantes.

Dificultades para conectar

Romney, quien construyó una fortuna de al menos 200 millones de dólares como directivo de empresas privadas, ha tenido problemas por conectar con los votantes conservadores y trabajadores del partido en una campaña que se ha centrado en su carrera como empresario.

De acuerdo con las nuevas reglas diseñadas para alargar la batalla, la mayoría de los estados en esta etapa del proceso adjudican delegados sobre una base proporcional.

Santorum, un ex senador por Pensilvania, ha conseguido el apoyo de conservadores religiosos gracias a su oposición al matrimonio entre homosexuales y su postura frente a temas sociales complejos. Pero sus controvertidos comentarios sobre el control de la natalidad y el papel de la religión han alejado a los votantes moderados, y Romney lo ha atacado con propaganda negativa.

"Vamos a ganar al menos un par de medallas de oro y muchas medallas de plata", dijo Santorum a sus partidarios. "Hemos ganado en el oeste, el medio oeste, el sur y vamos a ganar en todo el país", agregó.

La estrategia de Gingrich de centrarse en los estados del sur no rindió frutos en Tennessee y Oklahoma, pero prometió seguir en la carrera después de su triunfo en Georgia. "Hay muchas liebres corriendo, yo soy la tortuga. Doy un paso a la vez", dijo Gingrich.

Próximas batallas: Kansas, Alabama y Misisipi

Las próximas primarias importantes serán en Kansas, Alabama y Misisipi, estados tradicionalmente conservadores donde Romney afrontará una compleja batalla durante la próxima semana.

En la últimas campañas presidenciales, las primarias y asambleas populares del Súpermartes resolvieron la carrera republicana. Pero la de este año posiblemente se extenderá hasta abril o mayo bajo las nuevas reglas para atraer más votantes y entusiasmar a la gente.

Sondeos recientes indican que lo prolongado de la temporada de primarias podría en realidad alienar a los votantes, que ven cómo los candidatos gastan millones de dólares atacándose unos a otros y discutiendo temas como el control de la natalidad que sólo importan a los votantes más conservadores.