El Rey ha sido dado de alta a media mañana doce horas después de ser intervenido de nuevo en el hospital USP San José tras sufrir una luxación en la cadera derecha. El monarca ha pasado la noche "en observación" y ha recibido el alta médica sin pasar por planta. Según los médicos, su evolución ha sido "muy satisfactoria" por lo que se ha decidido su traslado a Zarzuela. Don Juan Carlos ingresó en la clínica el jueves por la noche después de que, por un mal movimiento, se le descolocara la prótesis que le implantaron hace nueve días en su cadera derecha. Esta tarde ha recibido al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, como estaba previsto.
El rey ha abandonado el hospital USP San José a las 11 de la mañana por la puerta de atrás en un coche con los cristales tintados.
Según el parte médico difundido, el monarca ha pasado la noche "en observación", sin pasar por planta y su evolución ha sido "muy satisfactoria" por lo que se ha decidido su traslado a Zarzuela.
En las próximas semanas, don Juan Carlos "continuará con las revisiones postoperatorias y el protocolo de recuperación intensiva previsto, en régimen ambulatorio".
El rey había retomado el jueves parte de su agenda pública, recibiendo en el Palacio de la Zarzuela al director del Instituto Cervantes, Víctor García de la Concha, y después al ministro emiratí de Exteriores, jeque Abdulá bin Zayed Al Nahyan.
Fue después de despedir al ministro emiratí, pasadas las 18.30 horas, cuando el Rey hizo un mal movimiento que le provocó una "luxación", según se explicó desde Zarzuela.
"Al estirar la pierna hizo un gesto de dolor"
Tal y como ha explicado en una entrevista en RNE, el ministro de Exteriores, José Manuel García-Magallo, quien también participó en el encuentro entre le rey y el ministro de Emiratos Árabes, en un momento don Juan Carlos "hizo un movimiento con la pierna" y aunque intentó disimular el dolor, tanto García-Margallo como su homólogo emiratí percibieron el daño que le había causado.
Según el jefe de la diplomacia española, el monarca "movió la pierna y al estirarla hizo un gesto de dolor" y dijo: "he hecho un mal movimiento". No obstante, el Rey trató de continuar con el encuentro y "disimular".
"El Rey es una persona con entereza y lo intentó disimular, pero yo percibí en su cara que estaba teniendo un dolor intenso. El príncipe de Emiratos se dio cuenta también" ha explicado, para señalar que fue entonces cuando ambos decidieron finalizar la reunión, que duró menos de lo previsto por el incidente.
No obstante, la intervención no ha impedido que el rey recibiera esta tarde en su despacho al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, como estaba previsto.