Píriz ha confirmado, como ya adelantó el pasado viernes 18 de noviembre, que finalmente los alumnos se examinarán de seis asignaturas, pero serán cuatro, las troncales, las que puntuarán hasta diez y servirán para superar la prueba, mientras que las otras dos, que serán de las opcionales, completarán la puntuación hasta 14, pero exclusivamente para subir nota, aunque los alumnos tengan que examinarse obligatoriamente también de ellas.
Píriz ha destacado, en declaraciones a Europa Press, que el acuerdo alcanzado va en la línea de trabajo que se ha venido manteniendo con el ministerio en los últimos tiempos en relación al acceso y la admisión a la universidad, después de que no saliera adelante su propuesta de prolongar un año más la PAU. "Entre todos hemos conseguido que sea prácticamente muy similar a la PAU", ha añadido.
En su opinión, el acuerdo va a satisfacer a la mayoría de las comunidades autónomas, sino a todas, a las universidades y a los estudiantes. En este sentido, también ha señalado que el ministerio ha escuchado y atendido las peticiones.
La diferencia más palpable entre la PAU y la prueba de Bachillerato es que los estudiantes se deberán examinar de las seis asignaturas, mientras que antes lo hacían de cuatro y sólo de otras dos si querían subir nota. Sin embargo, Píriz ha insistido en que para aquellos que no busquen una nota de corte alta estas dos asignaturas adicionales no serán definitivas porque la puntuación para superar la prueba será de 0 a 10.