Con este objetivo, los socialistas han registrado una proposición no de ley en el Congreso, recogida por Europa Press, en la que exigen que las calificaciones de esta materia no computen a efectos académicos y que tampoco sean tenidas en cuenta en procedimientos de concurrencia competitiva.
Independientemente de si el debate sobre si la enseñanza confesional de la religión debe ofrecerse dentro o fuera de la escuela, el PSOE vuelve a defender que se reviertan los cambios introducidos por la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad de la Educación (LOMCE), aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy.
Es norma introdujo el carácter evaluable y computable de la religión, agravando, según los socialistas, "el adoctrinamiento religioso", al ser sometido el alumnado a la presión de la evaluación.
Del mismo modo, critican que con la ley ahora en vigor se rompe el equilibrio social y educativo, respecto a otras asignaturas, que se había logrado en leyes anteriores en torno a la enseñanza de esta materia.