Condenados por abusar de una menor y retransmitirlo por Internet

Noticias Cuatro 28/10/2017 11:00

Según el diario Plymouth Herald, Sarah Gotham ha sido considerada culpable de seis delitos de asalto sexual a una menor de 13 años entre diciembre de 2012 y marzo de 2013.

La pedófila estadounidense Kori Ellis pidió a Forber y a Gotham por Skype que abusaran de una menor drogada, a la que llamaban “bella durmiente”. Ellis, que declaró en el juicio vía internet desde EEUU custodiada por el FBI, explicó al jurado que vio cómo abusaban de la niña por placer. Gotham abusó sexualmente de la víctima, a veces sola y en otras ocasiones junto a Craig, según la declaración de Ellis.

El detective Brian Slade,que llevó el caso en Reino Unido, considera a Ellis una testigo “muy dispuesta desde el principio. Dio muchos detalles de su comportamiento y de lo que pasó con Gotham y Forbes. Es inusual que un pedófilo sea tan franco; fue una testigo convincente aunque su declaración fue claramente desagradable, y en ocasiones, angustiosa para el jurado que la escuchaba”.

Slade explica que Gotham nunca ha mostrado remordimientos por sus crímenes y que nunca ha admitido las acusaciones. Durante las ocho semanas que ha durado el juicio, Gotham declaró ante el jurado que nunca conoció a la pedófila norteamericana Kory Ellis y que tampoco conocía a la niña de la que abusó. Pero al jurado solo le llevó tres horas y 20 minutos considerarla culpable de todos los cargos por unanimidad. Craig Forbes, el otro acusado, sí admitió el abuso de la menor. Fue condenado a ocho años de cárcelo.

“Gotham y Forber cometieron actos horrendos sobre una menor vulnerable. ientras que Forbes admitió lo que había hecho, Gotham actuó sin ningún remordimiento y siempre declaró que no tenía nada que ver con el asunto”, explica el detective Slade.

"Aunque es duro como una sociedad creer que las mujeres pueden participar en tales acciones para su propio disfrute, el hecho es que no hay duda de que tanto Gotham como Ellis son pedófilos que actuaron puramente para su propio placer", señala Slade.