Papeles Para Todos lamenta que los inmigrantes no puedan votar en el referéndum

EUROPA PRESS 14/09/2017 13:31

La Asociación Papeles y Derechos para Todos ha lamentado que las personas sin nacionalidad española no puedan votar en el referéndum del 1 de octubre ni participar en este proceso aunque lleven años en Cataluña, y han argumentado que sufrirán "las consecuencias de lo que se apruebe".

En un comunicado este jueves, la entidad ha explicado que desconoce lo que ocurrirá, después de la suspensión de la votación por parte del Tribunal Constitucional (TC), pero se ha mostrado favorable a que el pueblo catalán pueda votar libremente si quiere seguir formando parte de España y ha considerado "antidemocrática" la actitud del Gobierno central.

La asociación se ha mostrado preocupada por "qué consecuencias tendrá" para los inmigrantes el referéndum --en caso de realizarse-- y una posible independencia de Cataluña", y ha lamentado que la Ley de transitoriedad jurídica no indica si será necesario realizar un examen para obtener la nacionalidad, aunque sí que incluye que habrá una ley de extranjería catalana.

El texto recoge que serán necesarios cinco años de residencia y con papeles legales para poder solicitarla, y el portavoz Enrique Mosquera ha señalado que el plazo es positivo según el país de procedencia, ya que actualmente algunos tienen que esperar diez años, mientras que para otros será un agravio, ante los dos actuales.

En declaraciones a Europa Press, el representante ha considerado que se trata de una "ley de continuidad" con la española, y que con las informaciones actuales lo que observan es que una nueva republica no garantizaría unos derechos que consideran imprescindibles.

También ha criticado que en reuniones con representantes políticos catalanes, se afirmó que en una supuesta independencia, las personas que vivieran en Cataluña en ese momento pasarían a tener la nacionalidad catalana, y ha lamentado que la ley no refleje esta declaración.

ENCIERRO EN UNA IGLESIA

La entidad ha convocado una protesta, con un encierro en una iglesia del centro de Barcelona y huelga de hambre, para reclamar mejoras de sus derechos, ante el hecho de que los escenarios que se prevén --tanto que se produzca el referéndum, que se proclame una república, o que se mantenga la situación actual-- son "restrictivos" con los derechos de las personas migradas.

La huelga de hambre tendrá lugar a mediados del mes de octubre en una iglesia que ya ha dado su consentimiento, y evocará otras protestas en las que se han logrado mejoras.