En un comunicado, enviado como es habitual por el Secretario de Estado Vaticano, Cardenal Pietro Parolin, el pontífice se ha mostrado "profundamente entristecido al enterarse de la pérdida de vidas y heridos a raíz del violento ataque en la Iglesia Católica de San Felipe, Ozubulu".
"Su Santidad el Papa Francisco extiende sus más sentidas condolencias a todos los fieles de la diócesis De Nnewi, en particular las familias de los fallecidos y a todos los afectados por esta tragedia", señala el mensaje. Finalmente, el Papa ha invocado "voluntariamente las bendiciones divinas de consolación y fortaleza" para toda la diócesis.