Esta organización, formada por profesionales de emergencias especializados en rescate y compuesta fundamentalmente por bomberos y personal sanitario, vigilaba desde el pasado mes de diciembre la costa sur de Lesbos, pero la falta de financiación les obligó a replegarse hace dos semanas, según a Explicado a Europa Press su presidente, José Antonio Reina.
Es una cuantía, tal y como explica que esperan conseguir gracias a la "solidaridad" de la gente que entienda que su misión es "fundamental" allí. "Somos el único equipo de rescate que vigila la costa sur de la isla", explica.
Para ello, han habilitado un espacio en la plataforma 'Mi Grano de Arena' en el que se desglosa que del total, 7.000 euros serán para aparatos de electrónica como una sonda, un radar, o la radio que necesitarán en la embarcación de rescate, 40.500 para dos motores 200 HP y la instalación de los mismos en la barca, 45.000 euros para comprar una furgoneta adaptada para moverse por la isla y 2.500 más para un remolque para la misma.
"Somos el acto inmediato, la respuesta ciudadana al fracaso político, profesionales en emergencias que como voluntarios rescatamos a personas que huyen de la guerra y arriesgan sus vidas en el mar", añade Reina.
La ONG relata que la llegada de refugiados a las costas griegas ha sufrido un repunte en las últimas semanas. Desde mediados de julio, coincidiendo con el intento de golpe de Estado en Turquía y el auge de los atentados en el país, cada día llegan una o dos embarcaciones repletas de personas que huyen de la guerra y los pronósticos apuntan a que en pocas semanas la ruta del Egeo se reactivará por completo.
En la orilla griega, fundamentalmente en la isla de Lesbos, decenas de organizaciones y cientos de voluntarios esperan la llegada de barcas para asistir y cubrir las primeras necesidades de los refugiados.
"Llegamos a Lesbos con una mano delante y otra detrás", explica Reina, que asegura que si lograron auxiliar a más de 50.000 personas y se mantuvieron allí hasta hace poco fue gracias a las donaciones privadas.
El presidente de la ONG recuerda que ese dinero se ha acabado y, por ello, han decidido recoger y volver para reorganizarse, conseguir los recursos suficientes para hacer las cosas bien y regresar a Lesbos con un proyecto sólido que les permita seguir salvando vidas.
Para el bombero, "lo peor está por llegar" dado, a su juicio, el recrudecimiento de la violencia en Turquía y la sombra de la restauración de la pena de muerte anunciada por el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
"Todo suma y hasta ahora con muy poco hemos sido muy eficientes", añade Reina, que además recuerda que Prome-Aid comenzó a gestarse tal día como hoy pero hace un año, cuando la foto del pequeño Aylan muerto en la costa de Grecia dio la vuelta al mundo.
"Gracias a las donaciones de amigos ya tenemos la embarcación apropiada para esas aguas. Ahora nos hace falta vuestra ayuda para la parte electrónica y la motriz, subirlas a un carro y desplazarnos en una nueva furgoneta", se lee en la página del crowdfunding.