Una mujer que perdió a su bebé tras ser disparada en la barriga en Alabama, acusada de matar al feto

  • La policía asegura que ella comenzó la pelea

  • "La única víctima de verdad fue el feto", han afirmado

  • Alabama tiene la ley contra el aborto más restrictiva de Estados Unidos

Marshae Jones estaba embarazada de cinco meses cuando le dispararon en el estómago durante una discusión con otra mujer, según han explicado las autoridades. Unos hechos a los que su feto no sobrevivió. Sin embargo, el pasado miércoles 26 de junio, en lugar de la agresora, ella fue la única acusada por su muerte

La Policía la acusa de comenzar la disputa con la otra mujer y, como consecuencia, matar al bebé. “La única víctima de verdad fue el feto”, ha afirmado el teniente del departamento de Policía de Pleasant Grove, Danny Reid. “Fue la madre del niño quien inició y continuó la pelea que terminó con la muerte de su propio hijo”, continua.

En un principio, la policía acusó a la segunda mujer de homicidio por la muerte del feto. Sin embargo, este fue desestimado. “Cuando una mujer embarazada de cinco meses inicia una pelea y ataca a otra persona, creo que tiene alguna responsabilidad en cuanto a cualquier lesión del feto”, afirmó el teniente Reid.

El caso se ha producido en medio de un debate sobre los derechos de las mujeres embarazadas y de los fetos en Estados Unidos. Alabama, además, se sitúa como el punto cero del problema después de que en mayo el gobernador firmara un proyecto de ley que prohíbe el aborto en todas las etapas del embarazo. Además, criminaliza a los médicos que lo realicen.

Sin embargo, Jones no está sola. Varios grupos en defensa del derecho al aborto la han defendido, ya que consideran este caso un ejemplo de la criminalización del embarazo. “Así es como las mujeres, en especial de color, están siendo castigadas y se está criminalizando su embarazo”, afirman desde la federación nacional del aborto.