Más de la mitad de los desprendimientos de retina se dan en pacientes miopes

EUROPA PRESS 11/10/2017 14:53

Este gel se encuentra íntimamente adherido a la retina y generalmente contiene en su interior pequeñas condensaciones de colágeno que pueden verse al mirar contra una superficie blanca o al cielo en un día claro.

Estas "moscas volantes" son normales pero, al envejecer este gel, va a colapsarse y separarse de la pared del fondo de ojo, lo que hace que aumenten de forma significativa, con visión de luces o relámpagos, según ha explicado el subdirector médico del centro, Álvaro Fernández-Vega, que dirige su Unidad de Retina y Vítreo.

Durante esta separación, un pequeño porcentaje de pacientes puede sufrir un tirón de la retina y la rotura de la misma, produciéndose un desgarro retiniano, lo que hace que en poco tiempo se cuele líquido por esa rotura, separando la retina de la pared del globo ocular y causando una grave pérdida visual.

En estos casos, ha apuntado, es importante acudir al oftalmólogo inmediatamente cuando esta sintomatología se produce ya que, si se trata a tiempo, se puede realizar una soldadura del desgarro con láser y prevenir el desprendimiento.

Además, la tecnología también permite un diagnóstico mucho más preciso y menos invasivo, como es el caso de la tomografía de coherencia óptica, para ver con detalle el tejido de la retina, como si se tratara de una biopsia; la angio-OCT, otra técnica no invasiva para mostrar los vasos sanguíneos de la retina.