Según el observatorio, España registró un aumento de ventas de las estufas de pellets, aunque se instalaron menos calderas de biomasa que en 2015. En total, a finales de 2016 había casi 200.000 equipos de biomasa en funcionamiento en España, con una potencia instalada de 8.297MW.
La utilización de biomasa como fuente de energía térmica evitó en 2016 la emisión de 3,68 millones de toneladas de CO2 en España. En total, a finales de 2016 había funcionado en España 198.887 equipos de biomasa de alto rendimiento, 38.851 más que en 2016 (+24%), con una potencia instalada total de 8.297,6MW, según el Observatorio de Biomasa.
En concreto, durante 2016 se instalaron en España 35.815 estufas de pellet, un 22 por ciento más que el año anterior, lo que supone un nuevo récord de ventas.
La tendencia de comercialización de estas estufas se ha dirigido hacia los grandes almacenes de bricolaje y continúa al alza con equipos cada vez de menor potencia, pero más tecnificarnos. La potencia media de las estufas comercializadas en 2016 ha sido de 11,3kW.
El número de calderas instaladas el año pasado fue menor que en 2015: las de menos de 50kW, un 16% por debajo, mientras que las de 50 kW o más (instalaciones industriales y colectivas) registraron un descenso del 15 por ciento.
El presidente de AVEBIOM, Javier Díaz, ha manifestado que los datos ponen de manifiesto que la sociedad española "aún necesita mucha más información". "Tenemos que hacer un mayor esfuerzo en comunicación, porque lo que ofrece la biomasa es bueno para los usuarios y muy positivo para los intereses generales del país", considera.
Si bien, los datos apuntan a un cambio de tendencia e impulsa "muy probablemente" por el fuerte incremento del precio del gasóleo de calefacción que el inverno pasado llegó a costar hasta un 50 por ciento más con respecto al año anterior".