¿Merece la pena ser jefe? Los más pendientes del móvil en la playa

Noticias Cuatro 16/08/2018 18:47

Llegan las vacaciones y los trabajadores cambian la oficina por la playa. Pero, con frecuencia, se llevan sus obligaciones a su destino veraniego. Esto es lo que se desprende del informe InfoJobs-ESADE 2017, en el cual se afirma que el 51% de la población activa española declara responder correos electrónicos y atender llamadas de trabajo durante su periodo de vacaciones o en sus fines de semana libres.

De estos, el 36% afirma hacerlo porque se siente obligado a ello. El 34% declara que el puesto de trabajo lo requiere, mientras que un 14% lo hace porque siente la necesidad de estar al día de todo lo que ocurre en el trabajo. En el caso concreto de los mandos intermedios y directivos, el principal motivo es que su puesto de trabajo lo requiere, con un 41 y 56 por ciento respectivamente.

Sin embargo, no desconectar en el trabajo también tiene su precio, ya que un año más, los mejores salarios se los llevan los puestos directivos. A ellos, hay que añadir puestos profesionales muy específicos como son los ortodoncistas y odontólogos. En concreto, un directivo gana de media 41.351 euros brutos, mientras que un consejero directivo aumenta esta cifra hasta los 47.597 euros, según el informe.

A favor de las políticas de desconexión

En el informe, se recoge que el 76% de la población activa española se muestra a favor de que las empresas implanten políticas de desconexión digital. Además, un 46% cree que estas medidas permitirían conciliar mejor la vida personal y profesional. Unas políticas que tan solo están presentes en el 28% de las empresas españolas encuestadas.Por tamaño, las grandes empresas son las que menos implantan estas medidas.

Para ello, recientemente se ha propuesto reformar la Ley de Protección de Datos, que incluye, por primera vez en España, la llamada “desconexión digital” o “desconexión laboral”. En el texto se recoge el derecho de los empleados a no tener que responder a e-mails fuera de su jornada de trabajo, así como a respetar su tiempo de descanso y vacaciones.

Algo que ya se implantó en Francia cuando se aprobó la reforma laboral. Desde el pasado 1 de enero de 2017, los trabajadores del país galo tienen derecho a desconectar fuera del horario de trabajo. Gracias a esta medida, los franceses no tienen que estar pendientes del teléfono móvil o su correo electrónico fuera de su horario laboral. Así, tanto trabajadores como jefes consiguen olvidarse de verdad durante las vacaciones.