Su lucha por conseguir que el seguro le cubriera un trasplante le ha salvado la vida

Noticias Cuatro 14/05/2018 12:06

Erika había superado un cáncer de tiroides con 28 años, una enfermedad que le volvió a golpear años después cuando se encontraba en el mejor momento de su vida: había tenido un bebé y había formado una bonita familia junto a su marido.

Sin dejar de pelear ni un solo momento, Erika se ha sometido a numerosas operaciones, largos ingresos y un total de 70 sesiones de quimioterapia. "El cáncer es una forma lenta de tortura: te quita la dignidad, la paz mental y la estabilidad", ha llegado a asegurar.

Tras meses de lucha, los médicos le comunicaron que la única forma de que salvase su vida era cometiéndose a un trasplante de hígado. Según recoge CNN, la sorpresa llegó cuando la aseguradora de Erika le negó la operación alegando que esta intervención no garantizaba que salvase su vida.

Escribió al CEO de la aseguradora

Sin darse por vencida ni un solo momento, Erika escribió al director general de UnitedHealth Group, la compañía matriz de UnitedHealthcare (UHC) haciéndole reflexionar sobre lo que consideraba un proceso de revisión amañado, plagado de errores, que determinaba su vida no valía la pena salvarla.

Pero a pesar de la súplica de Erika, la posición de la aseguradora no cambió y le siguió negando la operación. Pero Erika no se dio por vencida y decidió presentar su caso directamente ante el CEO de UnitedHealth Group, David Wichmann.

"He estado haciendo todo lo que puedo hacer para mantenerme con vida durante los últimos cuatro años, arañando y arañando durante el día y rezando todas las noches para que surja una oportunidad como esta. Ahora, cuando la promesa de mi supervivencia a largo plazo es realmente la mejor, necesito el apoyo de UHC más que nunca", le explicaba.

Su caso puede sentar un precedente

Aunque le comunicaron que la carta había llegado al CEO y que estaban revisando su caso, Erika no recibía ninguna noticia. Cuando ya había perdido la esperanza por completo, el teléfono de su marido sonó. Era la aseguradora quien le comunicaba que habían aprobado la operación de Erika.

Según informa CNN, sin casi podérselo creer y muy felices, los médicos creen que el caso de Erika puede sentar un precedente para nuevos pacientes que se encuentren en una situación similar a la de esta madre.