Un verano de retos y nominaciones que empezó con el 'Legado de Tibu'

Noticias Cuatro 19/06/2014 00:25

Un reto, tres nominados y una penitencia.... ésta es la fórmula que está triunfando en España desde las últimas semanas. ¿Alguien no ha escuchado a estas alturas hablar del 'Legado de Tibu' ?. Damián Pereira, un gallego afincado es Suiza, es el verdadero responsable de la fiebre que se está viviendo en las redes sociales de nuestro país y que promete pasar todo el verano con nosotros.

"Me nominaron y tenía 48 horas para hacer el reto, que era pagar una noche de juerga o un pack de seis cervezas. Luego, nominé a tres amigos de la infancia. Mi idea era acercarme de nuevo a esos amigos, verles en vídeo. No esperaba este ‘boom’".

Bañarse con ropa en agua fría en busca de un fin era a lo que retaba a sus amigos de Camariñas (A Coruña) pero a partir de aquí la gente ha dejado volar su imaginación. Carreras en la playa, fotos de la infancia han sido los planes b de esta moda que a buen seguro tendrá planes c, d y hasta z a lo largo del verano.

Pasar un buen rato es el fin; no pagar una cena, el objetivo. El problema viene cuando algunos van más allá y la diversión comienza a ser peligrosa como sucedió en Francia donde un joven pèrdió al vida al lanzarse al agua con la bici o con el ‘Neknomination’, original de Australia, muy seguida en el Reino Unido y que consiste en acabarse de un solo trago la bebida.

Pero, ¿todos los jóvenes se dejan arerastrar? ¿Conoces a alguien que no lo haya llevado a cabo? ¿Las redes tienen hueco para los cobardes? Toda una fuente de estudio para los sociólogos y un beneficio para la sociedad ya que hay quienes han preferido aunar sus fuerzas en fines sociales y ayudar. ¿Cómo? Retando a sus amigos de las redes sociales a llevar a cabo gestos caritativos como hacer una donación, dar de comer a un indigente... Y es que en sus orígenes, el fin fue por una buena causa.

El orígen, una buena causa

Una familia de Misuri no podía pagar el tratamiento para el cáncer de su hijo y animó por las redes sociales a que se bañaran con agua fría, subieran el vídeo y donaran algo de dinero. Consiguieron llegar a los 30.000 euros y en pocos días esta campaña cruzó el charco.