Nassar solicitó no escuchar las declaraciones de sus víctimas al ser "perjudicial para su salud mental"

Noticias Cuatro 19/01/2018 17:46

Eran los últimos días de noviembre de 2017 cuando se daba comienzo al proceso judicial contra el apodado 'Monstruo de Míchigan'. Era él mismo quien se declaraba culpable de abusar sexualmente de siete niñas cuando era el médico del equipo de gimnasia de Estados Unidos y de la Universidad de Michigan.

Una larga lista de más de 125 mujeres son las que le han denunciado por agredirlas sexualmente una vez destapado el escándalo. Larry Nassar, 54 años, se mostraba arrepentido ante el tribunal y decía que rezaba todos los días por el perdón de sus víctimas. Además, entre sus víctimas se encuentra Gabby Douglas, oro olímpico de los Juegos de Río de Janeiro de 2016.

La juez del caso aseguraba durante la causa que el acusado utilizaba su posición de confianza frente a las niñas de la manera más vil porque las agresiones sexuales se producían bajo el pretexto de tratar médicamente a las menores en su casa o en una clínica del campus universitario. El caso del 'Monstruo de Michigan' ha dado la vuelta al mundo y la mayoría de los medios de comunicación han seguido su última hora.

En la tercera semana de enero de 2018, algunas de las víctimas reunieron el valor necesario para alzar su voz y enfrentarse cara a cara con el exmédico. Durante estos días han salido a la luz multitud de testimonios de las mujeres que tuvieron que enfrentarse a Larry Nassar: "Es un monstruo de la manipulación", "Abusó de mí cientos de veces", "Las sensaciones eran tan abrumadoras que pensé en suicidarme".

Él ha estado presente en cada declaración y lo que supuestamente aparentaba era ser un hombre compungido y arrepentido. Lo que no se sabía hasta ahora era que el acusado había mandado un escrito a la jueza pidiendo no estar presente cuando las mujeres testificasen en el litigio. Ha sido el portal de noticias TMZ el encargado de sacar esta información a la luz.

Según apunta el medio de comunicación estadounidense, Larry Nassar alegó a la fiscal que al estar presente en estas confesiones su salud mental sería perjudicada. Además, el médico no dudó en criticar todo el proceso judicial calificándolo como un "circo mediático". Finalmente, la magistrada desestimó la solicitud del acusado y tuvo que enfrentarse cara a cara con sus víctimas.