Indignación en Madrid contra las casas de apuestas: esperaban más de la normativa contra el juego

  • Hay casas de apuestas al lado de colegios o centros contra la ludopatía

  • En La Latina, Madrid, -con 27- ya no quieren ningún local más

  • Descontento con Garzón por la futura ley de la publicidad de apuestas

Criticas por insuficiente y tibio al decreto del ministerio de Consumo que limitará la publicidad del juego, mientras aumentan las protestas contra los locales de apuestas. Los vecinos de los distritos de La Latina y Retiro, donde más han proliferado estos locales, quieren que no se abra ni uno más.

Los hay a escasos metros de centros escolares y de centros de tratamiento de ludopatías. Esperaban mucho más de la normativa que solo prohíbe a los famosos en la publicidad de apuestas y permite anuncios en horario de máxima audiencia.

Todo un barrio en pie de guerra contra las casas de apuestas. En La Latina, Madrid -con 27- ya no quieren ningún local más. "El peligro es real y no se hace nada. Lo ponen al lado de los colegios, es increíble", señala una manifestante. Madres, padres y familias que ven cómo el juego lo destruye todo. "Nuestros jóvenes están en paro y la única salida que nos dan es esta. Que se endeuden más y no puedan resurgir", señala otra señora.

Descontento con Garzón por la futura ley de la publicidad de apuestas

Por eso tampoco les gusta que el Ministro de Consumo, Alberto Garzón, haya descafeinado la futura ley de la publicidad de apuestas. De entrada, se olvida de las aplicaciones de apuestas en el móvil. "Las regulaciones online tienen que llegar ya", señala un manifestante. Además, critican que se vaya a permitir esa publicidad en horarios de máxima audiencia.

Piden actuar ya, porque - dicen - es una droga como el alcohol o el tabaco. Ellos, de momento, sólo pueden hacer esto, plantarse ante una de las muchas casas de juego que hay en esta calle. Un sector que facturó el año pasado 2 500 millones de euros. Aunque la cifra más terrible es otra: la de la lista donde se apunten quienes tienen ludopatía y quieren que les prohiban entrar en estas salas. Ya hay 50.000 españoles apuntados.