Según las estadísticas del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA) consultadas por Europa Press, desde el 1 de enero de 1961 hasta el 13 de agosto de 2017 --fecha más actualizada-- el peor año de incendios registrados ocurrió en 1985, cuando ardieron un total de 484.476 hectáreas, seguido de 1978 (439.526); 1994 (437.635); y 1989 (426.693).
Por el contrario, según las estadísticas, el mejor año fue 1963, cuando ardieron 22.679 hectáreas; seguido de 1964 (31.398); y 1971 (35.044).
Además, desde 1961 hasta el año 2006, cuando se calcinaron alrededor de 7 millones de hectáreas, existe un registro de pérdidas económicas provocadas por los incendios forestales. La suma total de estos daños asciende a 6.729 millones de euros.
El año que más pérdidas arrojo fue 1994, cuando el ministerio arroja un cifra de hasta 1.325 millones de euros de pérdidas; seguido de 2006 (752 millones de euros); y 1989 (567).