Según han indicado fuentes cercanas al atleta a Europa Press, Ramírez está en coma inducido y permanece ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Clínico de Zaragoza. Presenta "importantes lesiones cerebrales" y ha necesitado ser intervenido quirúrgicamente este pasado domingo. El acceso a la UCI está restringido a amigos y familiares.
Su entorno ha asegurado que es una persona que se caracteriza por "no buscar nunca problemas, ni broncas" y han agregado que "en pocas ocasiones le hemos visto discutir con nadie, por lo que nos sorprende mucho que le hayan dado una paliza".
Tanto sus amigos, como compañeros de trabajo y la propia familia desconocen el motivo de esta agresión y confían en que la Guardia Civil "pueda esclarecer lo que realmente sucedió esa noche", ha indicado a Europa Press la pareja sentimental de Iván, con la que lleva algo más de medio año de relación y que también reside en Zaragoza. "Ahora solo me importa que él se ponga bien", ha dicho Ana.
La madre del atleta Iván Ramírez vive en la localidad zaragozana de Erla, próxima a Ejea de los Caballeros, municipio en el que encontraron a Iván tendido e inconsciente al lado de su coche con "brutales golpes", han señalado fuentes cercanas al deportista. "Si Iván estuvo en Ejea es porque tiene mucha familia ahí y quiso parar antes de ir a cenar con su madre a Erla", ha apuntado su pareja.
Fue un vecino de Ejea de los Caballeros el que encontró a Iván y dio aviso a la Guardia Civil, sobre las 00.30 horas del sábado, tal y como han manifestado fuentes de la Benemérita. Posteriormente, se avisó a la familia. Ana, su novia, y el resto de su familia se encuentran "en estado de shock" y la joven ha afirmado estar "muy afectada, al igual que su madre". A las puertas de la UCI del Hospital Clínico aguardan noticias.
Por el momento, la novia del atleta no ha prestado declaración ante los agentes de la Guardia Civil, quienes no descartan tampoco que pudiese haber más responsables en la agresión al deportista.