Sin embargo, a juicio de esta fundación, el estatus actual del lobo ha permitido un crecimiento en las manadas de cerca del 20% en los últimos años. En este sentido, la entidad, que se dedica a la promoción de la investigación y la comunicación de la caza, defiende la estrategia en vigor desde el año 2006 porque, según indica, ha logrado que el número de ejemplares de la especie se eleve a 2.500 en la Península Ibérica, la mayor población de lobos de Europa tras la de los Cárpatos y Balcanes, que cuentan con 3.000 ejemplares.
De hecho, Artemisan afirma que, según el último Censo 2012-2014 de Lobo Ibérico realizado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), el número total de manadas de lobo en España es de 297, frente a las 250 que había en 2007, siendo Castilla y León la comunidad autónoma en la que más manadas existen, con 179 manadas (163 exclusivas y 16 compartidas). Tras Castilla y León, se encuentra Galicia, que contabiliza 84 manadas; Asturias, con 37 manadas; y Cantabria, con un total de 12 manadas.
Por todo ello, rechaza la petición aprobada por el Parlamento al entender que el lobo no es una especie vulnerable o en "peligro de extinción" en todo el territorio.
En todo caos, valora de forma positiva la gestión y "esfuerzo" por parte d Administración central y autonómicas, así como del sector ganadero y cinegético, la comunidad científica y las organizaciones conservacionistas, para que el número de ejemplares de lobo siga creciendo en España, y destaca los modelos de gestión que se aplican en el noroeste español (en particular en Castilla y León), en los que la protección del ganado, así como la gestión cinegética y turística, actúan de forma sinérgica para asegurar la pervivencia de la especie y el desarrollo rural.
Igualmente, considera "muy positivo" la posibilidad de que el Gobierno esté estudiando de declarar al lobo especie cinegética al sur del Duero, tal y como recoge la comunicación elaborada por la Comisión Europea en el sentido de "flexibilizar" la gestión de la especie en toda España.
Artemisan aboga por aplicar e incorporar el conocimiento científico que se está generando para mejorar aún más la conservación y gestión de la especie, y resolver los conflictos generados por los daños a la ganadería a través de la mejora de las ayudas para evitar los ataques y una política ágil para compensar los daños que recoja también el lucro cesante.