Según han informado desde la Fundación, este trastorno altera la función cerebral y el comportamiento de las personas, hecho que dificulta su comunicación. El niño está escolarizado en la modalidad de integración y forma parte de un grupo ordinario y además tiene apoyos en función de sus necesidades individuales y de los recursos personales disponibles.
Por este motivo, el equipo educativo del centro escolar envió una carta a la Fundación Abel Matutes en la que solicitaba ayuda y explicaba los problemas a los que se enfrenta y cómo este dispositivo puede cambiar su forma de comunicarse e interactuar.
Respecto a la interacción social, el dispositivo Vox Ipad presenta programas que permiten anticipar situaciones que se salen de las rutinas, evitando momentos de frustración, según han explicado desde la entidad. En lo que a la comunicación se refiere, el soporte informático permite adquirir un mayor nivel de vocabulario, facilita la estructuración mental y el aprendizaje de habilidades sociales, así como la creación de estructuras comunicativas más amplias y complejas.
La presidenta del Comité Ejecutivo de la Fundación Abel Matutes, Carmen Matutes, ha señalado que "en el momento en que leímos la petición, decidimos colaborar y confiamos en que este dispositivo informático le resulte muy útil a Víctor". Tanto la familia del niño como su equipo educativo se han mostrado ilusionados con esta ayuda y muy agradecidos con la colaboración prestada.