Los Reyes Felipe y Letizia han presidido este viernes en el Palacio Real la reunión del patronato de la Fundación Princesa de Girona, la primera tras el referéndum independentista catalán del 1-O, a la que han acudido un total de 52 patronos, aproximadamente la mitad de ellas procedentes de empresas y fundaciones catalanas.
Entre los asistentes ha habido representantes de varias empresas que decidieron sacar su sede social de Cataluña, entre ellos el presidente del Sabadell, Josep Oliú; el consejero delegado de Planeta, José Manuel Lara; el presidente de Agbar, Ángel Simón; el de Allianz, Vicente Tardío y el consejero delegado de Gas Natural, Rafael Villaseca.
Pero también han acudido varios que han decidido mantener su sede en Cataluña, como ha sido el caso de Lidl España, Miquel y Costas, BASF, Esteve, Hijos de José Bassols, Grupo Godó, Grupo Zeta o Freixenet, que ha ligado esta continuidad al Gobierno que surja en Cataluña tras el 21D.
En la reunión se ha presentado el Informe de Actividad de 2017 y el estado de cuentas a 31 de octubre, así como el protocolo de actuación para el cierre del ejercicio 2017. También, se ha aprobado el Plan de Actuación y Presupuesto para 2018 y las modificaciones en la composición de los órganos de gobierno y la incorporación de nuevos patronos.
Ha sido la primera reunión del patronato sin la Cámara de Comercio de Girona, una institución que estuvo en la génesis de la fundación en 2009, junto a la Fundación Gala-Salvador Dalí, La Caixa y Caixa Girona --hoy absorbida por La Caixa--.
La Cámara tomó esta decisión el pasado 5 de octubre, esgrimiendo malestar por el mensaje que el Rey había dirigido a los españoles dos días antes, y especialmente por el hecho de que no condenase la actuación policial.
No obstante, tal como destacó el Rey en la última entrega de los premios de la Fundación, el pasado junio, en los últimos dos años --en los que ha aumentado la tensión política en Cataluña-- ha habido 30 incorporaciones al patronato.
Además, han asistido a la reunión el presidente del Consejo de Administración del Patrimonio Nacional, Alfredo Pérez de Armiñán; el presidente de la Fundación Princesa de Girona, Francisco Belil; el secretario de la Fundación Princesa de Girona, Enric Brancós, y la directora general de la Fundación Princesa de Girona, Mónica Margarit, así como los patronos de la Fundación y el equipo de administración y gestión de la FPdGI.
LA VICEPRESIDENCIA LA OSTENTA EL PRESIDENTE CATALÁN
Desde que la Fundación cambió su nombre de "Príncipe" a "Princesa" de Girona, la presidencia de honor de la Fundación corresponde a la hija mayor de los Reyes. La vicepresidencia de honor recae en el presidente de la Generalitat, un cargo que ahora está vacante. En todo caso, el vicepresidente honorario nunca ha acudido a la reunión del patronato en el Palacio Real.
La Fundación concede cada año un galardón colectivo a una entidad que trabaje a favor de los jóvenes y cuatro premios individuales a jóvenes (entre los 16 y los 35 años) que acometen y comienzan una obra o un proyecto, en cuatro categorías: Social, Investigación Científica, Artes y Letras y Empresa.
En la última entrega, el pasado junio, el Rey destacó ante Puigdemont el compromiso "con los valores que han engrandecido Cataluña, que han estado en la base de su progreso y, por tanto, del progreso de toda España".
La fundación ha seguido trabajando con normalidad a pesar de la tensión política. "El año que viene, cuando nos volvamos a reunir para reconocer los méritos de nuestros nuevos premiados, tendremos, una vez más, la oportunidad de reafirmar nuestro compromiso", decía Felipe VI el pasado junio, cuando Puigdemont ya había anunciado la convocatoria de un referéndum.