Las lluvias de las sucesivas borrascas que han tenido lugar las dos últimas semanas han permitido que los embalses crezcan más de diez puntos, pasando del 43,5 al 53,7 por ciento de su capacidad, según datos facilitados por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA).
Así, en quince días, las precipitaciones han inyectado 5.708 hectómetros cúbicos de agua y han elevado los embalses por encima de la mitad de su capacidad, algo que no ocurría desde hace ocho meses.
Solo en la última semana, las lluvias han inyectado 3.813 hectómetros cúbicos a los embalses, aporte récord (6,8%) en una semana desde 2010 (el 5 de enero de ese año el volumen de agua embalsada se elevó en 4.283 hm3).
La reserva hidráulica almacena actualmente 30.120 hm3 de agua y se eleva hasta el 53,7 por ciento de su capacidad total, rebasando la mitad de su cabida por primera vez en los últimos ocho meses y volviendo a niveles de junio de 2017.
Sin embargo, 2018 sigue siendo el año con menos agua embalsada de la década en invierno, con un 23,2 por ciento menos de agua embalsada que la media de la década y un 8,8 por ciento menos que hace un año.
A pesar de la media general, por encima del 50 por ciento, hay cuencas que no llegan al 30 por ciento de su capacidad, como el Júcar, (28,7%) y el Segura (20,1%).