Se trata de la primera semana que los embalses ganan agua en varios meses, aunque las cifras aún están entre las más bajas desde 1990. Por ejemplo, los embalses albergan en la actualidad un 33,99 por ciento menos agua que la media de los últimos diez años y un 28,62 por ciento menos que en las mismas fechas del año pasado.
De hecho, en la semana 50, solo ha habido menos agua embalsada en 1994, cuando estaban al 35,80 por ciento, y en 1995, cuando tenían un 29,48 por ciento de ocupación, por lo que 2017 sigue siendo el año más seco de este siglo y el tercero peor en el último cuarto de siglo.
Esta semana las lluvias han afectado principalmente a la vertiente atlántica y la máxima se ha producido en Santiago de Compostela, con 140 litros por metro cuadrado.
Por ámbitos, la reserva se encuentra al 80,8 por ciento en Cantábrico Oriental; al 51,2 por ciento en Cantábrico Occidental; al 38,7 por ciento en Miño-Sil; al 43,4 por ciento en Galicia costa; al 66,7 por ciento las cuencas internas del País Vasco; al 28,7 por ciento, Duero; al 37,1 por ciento el Tajo y al 44,1 por ciento, Guadiana.
Además, Tinto, Odiel y Piedras está al 66,4 por ciento; Guadalete-Barbate, al 38,9 por ciento; Guadalquivir, al 31,5 por ciento; la cuenca Mediterránea Andaluza, al 30,7 por ciento; Segura, al 13,7 por ciento; Júcar, al 25 por ciento; Ebro, al 43,4 por ciento y las cuencas internas de Cataluña, al 47,1 por ciento.