Su brazo desnudo y desgarrado lo ha visto media España. Hemos hablado con Dauda, de 23 años y de Burkina Faso. Consiguió saltar la valla de Melilla al tercer intento, pero se le quedó enganchado el brazo en una concertina. Tras un sonido desgarrador, cayó al suelo con el brazo abierto en canal. Hoy lo tiene vendado. Ni el protagonista puede mirar su herida en la fotografía del móvil.