La organización ha señalado que, sin esta ayuda, estos conductores se quedarían desatendidos y sin acceso a este servicio "esencial", como ocurre ahora mismo en muchas comunidades autónomas sin normativa de este tipo.
Por ello, critica que la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC) rechace "beligerantemente" en un informe las regulaciones que exigen a las estaciones de servicio (gasolineras) la presencia de personal de atención al cliente.
En este sentido, señala que la CNMC acude a motivos "puramente economicistas de favorecimiento de la competencia" e ignora cualquier consideración laboral, social y de protección al consumidor. La organización ha criticado esta postura y asegura que las estaciones de servicio constituyen un servicio al público de primera importancia que ha de estar sometido a exigencias de satisfacción del interés público y el bien comunitario.
De esta forma, para evitar la exclusión "tan dañina para las personas con discapacidad conductoras", el CERMI reclama al Gobierno, a través del ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, que promueva un cambio en la legislación estatal, vinculante en todo el territorio nacional.
Este cambio, según precisa, debe establecer como obligación que todas las estaciones de servicio dispongan en todo momento de personal de atención al público. Además, ha subrayado el deber del personal de asistir específicamente a los conductores con discapacidad en el repostaje de carburante y tareas conexas.