El 20% de los que mueren por parada cardiorespiratoria podrían sobrevivir con una RCP hecha en los primeros 8 minutos

EUROPA PRESS 11/11/2016 15:07

Asimismo, durante el curso, los participantes han podido obtener información sobre la importancia de la cadena de supervivencia, que consta de 4 fases: reconocimiento y activación del sistema de emergencias médicas; llamada al 112, RCP practicada por el primer interviviente; desfibrilación precoz; y soporte vital avanzado y cuidados postreanimación.

En concreto, existen tres tipo de RCP: la básica, que se realiza sin equipo, a través de compresiones torácicas y respiraciones de rescate, con una secuencia de 30 compresiones/2 respiraciones; la instrumentalizada, que incluye además de lo anterior un desfibrilador externo semiautomático; y la avanzada, que incluye todo el equipo necesario.

Respecto a esta última, que ha constituido el núcleo central del curso, precisa equipamiento y entrenamiento adecuados, es deseable iniciarla antes de 8 minutos desde la parada y necesita al menos 2 reanimadores, dirigiendo el más experimentado. Todo ello, tal y como se ha puesto de manifiesto, con el objetivo de realizar compresiones torácicas de calidad (con una frecuencia de 100/120 por minuto y con una profundidad de 5/6 centímetros), y conseguir una desfibrilación precoz.

Además, los participantes han podido acceder a un programa completo de formación en soporte vital avanzado, con recomendaciones sobre cómo realizar una RCP instrumentalizada, asistencia circulatoria y ventilatoria, utilización de fármacos, accesos venosos, identificación y tratamiento de arritmias (con fármacos y con desfibrilador), RCP en situaciones especiales tales como anafilaxia, hipotermia o ahogamiento, entre otras y RCP pediátrica.

Finalmente, se han realizado doce talleres prácticos, entre otros RCP básica y en equipo, RCP avanzada y con desfibrilador automático, RCP pediátrica y con simulador 'Megacode'.