Las primeras horas del asesino caníbal en la cárcel: tiene un preso sombra y protocolo antisuicidio

cuatro.com 25/02/2019 15:00

Alberto S.G, el joven de 26 años interno en la prisión madrileña de Soto del Real desde el sábado tras, supuestamente, matar a su madre, descuartizarla, introducir trozos de su cuerpo en táperes para después guisarlos y comérselos, permanece en la enfermería de la cárcel sometido al protocolo antisuicidios. Alberto ha pasado por todos los pasos de cualquier recluso cuando ingresa en la cárcel: toma de huellas, fotografías y entrevistas con el servicio médico. Pero el desenlace ha sido distinto: ha ido directamente a la enfermería.

El recluso, dadas sus circunstancias y su estado, ha sido incluido dentro del protocolo antisuicidios lo que significa que el recluso cuenta con la vigilancia de otro considerado de confianza para la prisión y denominado "preso sombra, también en su estancia en la enfermería. Se intenta evitar así que pueda quitarse la vida. El caso ha conmocionado a la opinión pública por su crueldad, no en vano, Alberto mató, descuartizó, guisó y se comió a su madre dándole raciones a su perro.

La frialdad del hijo y las explicaciones a los agentes en el domicilio -también en dependencias policiales prefirió no declarar- apuntan a un caso de canibalismo excepcional y a que el joven sufre un trastorno mental. Además, el detenido consumía drogas, entre ellas droga caníbal, y contaba con doce antecedentes policiales por maltrato a su madre. Una vecina alertó de que no veía a la mujer que vivió un auténtico calvario con su hijo desde hacía un mes po lo que la mujer, dada las características del caso, podría llevar muerta semanas.