Lo han hecho siguiendo una convocatoria de los gestores del centro 'okupado', que han llamado a los vecinos a llevar palas, picos, cubos, mortero y elementos de decoración para acceder al edificio y rehabilitar lo derruido después del desalojado de este lunes.
Una decena de personas ha accedido al recinto para valorar el estado del edificio y han comenzado a sacar escombros para despejar la zona, ante la mirada de agentes de la policía y de Bomberos de Barcelona.