Los agentes que detuvieron al caníbal de Ventas no han visto "otro caso igual”

Cuatro al día 26/02/2019 08:45

Alberto Sánchez Gómez, de 26 años, le abrió la puerta a la policía y les dejó entrar. Los agentes se encontraron una escena dantesca. Tienen mucha experiencia pero nunca habían visto "otro caso igual".

El caníbal de Ventas estaba cocinando parte del cuerpo de su madre en una olla. En el horno también había otro trozo. La mujer había sido descuartizada en trozos muy pequeños, repartidos por toda la casa en cajones, táperes... Algunos policías quedaron en estado de shock y tuvieron que salir un rato de la vivienda.

El joven, en prisión sin fianza, había cortado a su madre con mucha precisión. La había estado comiendo durante varios días y le había dado al perro.

Para los conocidos de la familia, Alberto Sánchez Gómez era un chico muy problemático. A su madre le pegaba. Ella lo había denunciado por malos tratos hasta en 12 ocasiones y tenía una orden de alejamiento. Sin embargo, la mujer, de 66 años, siempre le dejaba volver a casa porque no quería o no podía ver a su hijo en la calle.

Sus vecinos cuentan que ella ocultaba su rostro bajo unas gafas de sol porque muchas veces tenía los ojos morados. Siempre le pedía dinero a la madre y si no se lo daba se lo quitaba. Los amigos del caníbal dicen que el joven era normal hasta que hizo un Erasmus en Grecia. Allí probó la droga caníbal, que a su vuelta siguió consumiendo y presuntamente mezclando con alcohol y marihuana.