Acampados contra los recortes en Sanidad

cuatro.com 30/09/2011 09:49

Centenares de trabajadores del Hospital de Sant Pau han pasado la noche en tiendas de campaña. Protestan así contra el ERE de suspensión temporal que afectaría a 1.500 trabajadores y contra los ajustes en sanidad, protesta a la que se han sumado empleados de otros hospitales como el Dos de Maig o el de Terrassa. Antes, medio millar de médicos internos residentes protagonizaron una segunda protesta ante la sede del Instituto Catalán de la Salud (ICS).

Cientos de empleados del Hospital de Sant Pau han acampado en el 'hall' y la entrada principal del recinto.

Los trabajadores hospitalarios, que han dormido en tiendas de campaña, protestan así contra del ERE de suspensión temporal que afectaría a 1.500 compañeros y contra de los recortes en sanidad.

"Un ERE significaría que los derechos sociales y económicos de los trabajadores quedarían recortados", tal y como ha mantenido Eduard Lucas de FTC-IAC.

Según han explicado los propios afectados, el objetivo de la iniciativa es realizar una "jornada de reflexión nocturna", y entre las pancartas que se pueden leer hay consignas que rezan: 'No a los recortes a la sanidad pública, no a los recortes en el Hospital de Sant Pau'.

A la protesta de los empleados del Hospital de Sant Pau se han sumado empleados de otros hospitales como el Dos de Maig, el de Terrassa así como usuarios y vecinos de la zona.

Manifestación espontánea en Barcelona

Horas antes, tras dos grandes pancartas que rezaban 'Nuestra formación, la salud de todos' y 'Exigimos asistencia y formación de calidad. No a los recortes', los jóvenes licenciados de Medicina criticaron que su formación está en peligro por la reducción de las guardias y, por ende, su aprendizaje y experiencia.

Unos 400 sanitarios cortaron la Gran Via y la calle Balmes de Barcelona contra el recorte salarial que tenía previsto negociar la Mesa Sectorial del ICS y que se ha suspendido por la irrupción de 200 trabajadores en el edificio.

La manifestación de la tarde, a la que el sindicato Metges de Cataluña dio su apoyo, se inició cuando los concentrados empezaron a caminar de forma espontánea, hasta superar los 500 manifestantes en varios momentos de la marcha.

La marcha finalizó en la plaza Sant Jaume ante el Palau de la Generalitat, donde se leyó un manifiesto en el que se afirmó que algunos hospitales han clausurado durante el verano hasta el 60% de las camas, la misma proporción en la que se han reducido la actividad quirúrgica "en algunos momentos".