El lanzamiento del plátano le ha costado a David la detención por un delito contra los derechos fundamentales y libertades públicas. Anoche le llamaron a declarar, le detuvieron y, poco después, fue puesto en libertad con cargos. El club ya le ha retirado el carné de socio y le ha prohibido la entrada al Madrigal de por vida. Tampoco podrá acceder a la Ciudad Deportiva, lo que pone fin a su relación con la cantera del club, donde colaboraba. Es la penitencia que tendrá que cumplir este aficionado por lanzar un plátano al barcelonista Dani Alves, un gesto con connotaciones racistas al que el afectado respondió con sorna: comiéndose la fruta. El propio Alves ironizaba en twitter sobre las bondades del plátano para evitar calambres. Le siguieron infinidad de comentarios y actos solidarios bajo el lema "todos somos macacos". El tema ha quedado en manos de la justicia.