Los obispos españoles no aconsejan el preservativo

Cuatro/ CNN+ 26/11/2010 19:16

El secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), monseñor Juan Antonio Martínez Camino, ha afirmado que el Papa Benedicto XVI no ha legitimado "ni de lejos" el uso del preservativo ni la "prostitución" en el libro-entrevista de Peter Sewald 'Luz del Mundo'.

En este sentido, Camino ha señalado que el uso del preservativo "siempre" sucede "en un contexto de inmoralidad" y que "nunca se puede aconsejar". Además, ha explicado que las palabras del Pontífice no suponen ninguna novedad en la doctrina de la Iglesia y ha apuntado que, por ello, los obispos no han tratado el tema en su Asamblea Plenaria.

Asimismo, Camino ha transmitido a los católicos que "no hay motivo de alarma" y que saben que la doctrina de la Iglesia "no se aprende en los titulares de la prensa" sino que, según ha explicado, para la comprensión de la fe está "la catequesis, la clase de religión y la confesión". Por otra parte, se ha referido a las profesionales de la prostitución y ha remarcado que "la mayoría" de estas personas, a su juicio, "víctimas de ese mundo", "seguro que tienen sus creencias".

Igualmente, ha destacado que, ante las palabras del Papa sobre el preservativo, surgieron en la prensa "titulares inexactos" o que, a su juicio eran "barbaridades" y, frente a esto, ha insistido en que hay que leer las respuestas del Santo Padre "con serenidad".

"Supuesta bondad" de la ley de muerte digna

Por otro lado, Martínez Camino se ha referido a la propuesta de Ley de Cuidados Paliativos y Muerte Digna y ha subrayado que la muerte "con dignidad" no es la causada por otra persona porque, según ha remarcado, "no se puede matar a ningún ser humano por ningún motivo" y ha declarado que, si se introdujese con el respaldo legal la "supuesta bondad" de quitar la vida a un ser humano, sería "tremendo".

Así ha indicado que la eutanasia en sentido estricto, sea directa o indirecta, no es algo "digno". No obstante, ha afirmado que tampoco es "ético" retrasar la muerte "absurdamente, a costa de sufrimientos e intervenciones técnicas". Para Camino, la muerte debe llegar con "la mejor asistencia" espiritual y médica, "incluso a costa del acortamiento de la vida".