En las playas de Baiona está prohibido fumar desde el año 2012. El ayuntamiento pontevedrés se convirtió en el primero de toda España en tener todas sus playas libres de humo. En la actualidad no existe vigilancia ni sanciones para aquellos que se saltan la norma.
Una de cada tres playas gallegas se ha adherido a esta medida aunque todavía queda mucho trabajo por hacer. Un ejemplo de ello está en la playa de Bastiaguiero, en A Coruña, donde en apenas una hora rellenamos una botella entera de colillas.
En la playa de Nigrán varios niños han fabricado contenedores para concienciar a los fumadores a tirar las colillas en los ceniceros situados fuera de ella.
32.800 millones de colillas inundan cada año las playas españolas generando un grave riesgo para el medio ambiente. Un cigarrillo tarda entre 8 y 12 años en descomponerse y ya son la principal fuente de basura mundial por delante de los envases, botellas y bolsas de plástico.