Kimiko se inició tardíamente a la fotografía ya que fue con 72 años cuando se apuntó a un curso de fotografía dirigido por su propio hijo.
A partir de ahí, desarrolló un gran interés por el mundo fotográfico y comenzó a exponer su vena artística. Fue más tarde cuando se animó a compartir sus curiosas fotos en las redes sociales, llegando a miles de personas.
Es ella misma quien gestiona sus cuentas de Facebook e Instagram a partir de su teléfono móvil y maneja programas de edición.