"Sin pruebas y con indicios forjados. Sólo les queda el linchamiento. Acudiré a instancias nacionales e internacionales para defenderme", ha asegurado Glas.
Asimismo, el mandatario ha señalado que acatará "bajo protesta" la orden, agregando que "aún tiene fe en que la justicia se imponga". "Ante ella probaré mi inocencia", ha remachado.
La decisión de la Fiscalía ha tenido lugar tras haber hallado presuntos indicios de una posible vinculación entre Glas y una red de sobornos orquestada desde la constructora brasileña Odebrecht en el marco de un caso de corrupción que ha salpicado a varios gobiernos latinoamericanos.
"Hemos pedido una audiencia para la sustitución de esta medida de prisión preventiva, que es absolutamente exagerada", ha informado el abogado defensor del vicepresidente, Eduardo Franco Loor.
Glas ya tenía prohibido salir del país por este caso, pero ahora el fiscal Carlos Veca ha pedido su entrada en prisión al encontrarse "nuevos elementos de convicción" que le vinculan con un presunto delito de asociación ilícita, según ha informado el Ministerio Público en Twitter. La Fiscalía también ha pedido la retención de sus cuentas y la incautación de bienes.
El llamamiento se ha extendido también al tío del vicepresidente, Ricardo Rivera, actualmente bajo arresto domiciliario. Veca ha justificado en este caso que existe "potencial riesgo de fuga", por lo que también ha pedido que Rivera sea trasladado a una prisión.