El mandato fundamental de la misión de asesoramiento europea, que se desplegó en diciembre de 2014, es apoyar a las autoridades ucranianas en la reforma de sus fuerzas de seguridad civiles como la Policía y apoyar la reforma del sector de seguridad, especialmente la Fiscalía.
La misión europea no tiene mandato ejecutivo, es decir, capacidad para utilizar la fuerza y sus efectivos no van armados. Su cuartel general está en Kiev, aunque cuenta con presencia regional en Leópolis y Jarkov y "pronto" también en Odesa.
Los expertos europeos ofrecen asesoramiento "estratégico" a las autoridades ucranianas y "entrenamiento" para ayudar al país a desarrollar unas fuerzas de seguridad civiles "eficientes" y responsables, que contribuyan a reforzar el Estado de Derecho en el país.
El objetivo último es contribuir a restablecer la confianza de la población ucraniana en sus fuerzas de seguridad, que han estado salpicadas por acusaciones de corrupción y malas prácticas.