"El nuevo Gobierno tendrá que garantizar la estabilidad del país en esta nueva fase política, con la adopción de las medidas económicas y sociales necesarias para todos los libaneses", ha declarado Mogherini.
En su declaración, la jefa de la diplomacia europea ha calificado de "crucial" la elección del presidente tras más de dos años de crisis política, en un momento en que Líbano debe afrontar desafíos como la guerra en su vecina Siria y la acogida de cientos de miles de refugiados que huyen del conflicto.
Por confía en que la designación de Aoun "abra la vía para que todos los partidos políticos se comprometan en un diálogo constructivo y compartan la responsabilidad" de buscar soluciones a la larga crisis institucional y den respuestas a las necesidades de los ciudadanos.
La Unión Europea, ha añadido Mogherini, se mantiene plenamente comprometida con el apoyo a Líbano en todas las áreas, pero "en especial" en la gestión de la crisis migratoria.
Además, la Alta Representante ha recordado que las elecciones parlamentarias del próximo año serán una cita "clave" para la democracia en Líbano. La Unión Europea prevé desplegar una misión de observación como apoyo a los comicios, y en respuesta a una invitación de las autoridades libanesas.
Por último, Mogherini ha destacado el aguante de Líbano pese a las muchas dificultades y ha reiterado el apoyo europeo, al tiempo que ha reconocido el papel jugado durante estos dos años por el presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, por el primer ministro, Tammam Salam, y por el Ejército y fuerzas de seguridad del país.