"He hablado con el presidente Xi de China para felicitarle por su extraordinario ascenso", ha escrito el magnate neoyorquino en su cuenta oficial de la red social Twitter.
Xi ha conseguido ser reelegido como secretario general del PCCh, un cargo al que llegó en el congreso nacional celebrado en 2013.
Pero su gran victoria política ha sido conseguir cambiar los estatutos del PCCh para incluir en ellos una ideología desarrollada por él mismo para convertir a China en "una potencia socialista moderna".
Este hito le sitúa al nivel de Mao Tse Tung en la historia del PCCh y garantiza su influencia en la política china más allá de su mandato presidencial.
AGENDA BILATERAL
Por otro lado, Trump ha indicado que ha tratado con Xi otros temas "muy importantes", como la creciente amenaza de Corea del Norte y las relaciones comerciales.
Estados Unidos pretende hacer de China un aliado contra el régimen de Kim Jong Un, al que tradicionalmente ha respaldado sin fisuras, por sus continuas pruebas nucleares y con misiles balísticos.
En el plano económico, la Administración Trump también espera redefinir las relaciones bilaterales conforme al rumbo proteccionista que ha adoptado la potencia occidental.
Está previsto que los dos líderes traten éstos y otros asuntos de interés común durante la reunión que tendrán como parte de la visita a China de Trump, que el próximo 3 de noviembre iniciará su primera gira asiática.