Los tres occidentales trabajaban como ingenieros para una empresa italiana de construcción en el aeropuerto de Ghat, en el sur de Libia, cerca de donde fueron secuestrados el 20 de septiembre.
De acuerdo con las fuentes consultadas por el citado medio, aunque la zona en la que fueron secuestrados es considerada como territorio de AQMI, los secuestradores habrían actuado por su cuenta. "El grupo está compuesto por libios y argelinos y está liderado por el argelino Abdelá Belakahal", ha indicado un responsable de seguridad argelino.
Según esta fuente, el grupo de Belakahal amenaza con "entregar a los rehenes a AQMI o a una célula de Estado Islámico" si no recibe el rescate. Asimismo, los captores también habrían solicitado la liberación de dos prisioneros, uno de ellos hermano del líder del grupo, en prisión por tráfico de armas.
Middle East Eye afirma, citando fuentes "creíbles", que las negociaciones que están llevando a cabo como mediadores miembros de tribus libias están avanzando y que se espera que los rehenes "sean liberados pronto".