En la votación de este miércoles, sólo 168 diputados han apoyado a Dimas, 32 menos de los necesarios --hacían falta 200 apoyos--. Para la última ronda, el umbral mínimo cae hasta los 180 legisladores, aunque este listó aún queda por encima de los votos sumados hasta ahora por el Gobierno.
Samaras ha destacado que, "a pesar de las diferencias, del terrorismo y de las calumnias" de la oposición, "más diputados han votado a Stavros Dimas como presidente" este martes. La semana pasada, el candidato del Ejecutivo logró 160 apoyos en el Parlamento, ocho menos de los obtenidos en segunda ronda.
El primer ministro ha logrado nuevos respaldos después de proponer el domingo la formación de un goberno de concentración y adelantar las elecciones a finales de 2015. "Espero que en la tercera ronda esquivemos el peligro para la nación", ha dicho Samaras tras la segunda votación, según el periódico 'Kathimerini'.
El primer ministro se ha esforzado en las últimas semanas por alertar de los riesgos que tendría para la estabilidad política y económica del país la convocatoria de nuevas elecciones, que previsiblemente se celebrarían a finales de enero.
De cara a la votación del lunes, Samaras ha subrayado que los parlamentarios ya no podrán responder diciendo "presente" y absteniéndose cuando les pregunten por su candidato a la jefatura de Estado. "Todos los diputados tendrán que responder por la ansiedad de los griegos y el interés de la nación", ha apostillado.
CHEQUE EN BLANCO
Sin embargo, desde la oposición tanto la Coalición de la Izquierda Radical (SYRIZA) como partidos minoritarios como Izquierda Democrática y Griegos Independientes han rechazado la propuesta del primer ministro.
El líder de SYRIZA, Alexis Tsipras, ha advertido de que "ni el Parlamento ni el pueblo le entregarán a Samaras un cheque en blanco para continuar el programa y aplicar nuevas medidas de austeridad que recortarán las pensiones, aumentarán los precios de las medicinas y saquearán a la sociedad".
"Con el nuevo año, nuestro país pasará a una nueva página, con un poderoso mandato popular para una negociación real", ha dicho Tsipras, partidario de replantear las condiciones en las que Grecia está recibiendo el rescate internacional.