Salva la vida de su hermana gracias a un transplante de médula

cuatro.com 29/08/2011 10:55

El vínculo entre hermanos es inquebrantable, pero el caso de Lauren y Emily es distinto. A la pequeña Emily, de cinco años, solo le quedaban seis meses de vida de no haber encontrado un donante de médula ósea. Los médicos descubrieron que padecía amenia aplástica, una enfermedad caracterizada por un desarrollo incompleto de las células de la médula. Así, tras varias pruebas, se descubrió que su propia hermana Lauren, de 9 años, era su única salvación ya que era la única compatible para realizar un transplante.

Emily Wither comenzó a sentirse agotada y cansada a principios de abril del año pasado. En un primer momento, los médicos aseguraron que la pequeña padecía un simple resfriado, pero la realidad era distinta.

Tras meses y meses de pruebas, los médicos le diagnostican una extraña enfermedad llamada amenia aplástica que se caracteriza por un desarrollo incompleto de las células de la médula.

Los doctores aseguraron que a la pequeña solo le quedaban seis meses de vida si no se sometía a un transplante de médula ósea.

Su madre, en declaraciones al Daily Mail, aseguró que el momento que les dieron la noticia "fue devastador". "No lo podíamos creer. Todo nuestro mundo se derrumbó por completo", ha señalado.

Así, comenzó una desesperada carrera contra el tiempo para hallar el donante adecuado para poder salvar la vida de Emily.

Toda la familia se sometió a las pruebas para ver si eran compatibles pero ninguno de ellos, salvo Lauren, podían serlo.

Su hermana mayor, de nueve años, era la única persona que podía ayudar a Emily. "Comenzó a llorar de alegría y no paraba de decir que ella era la que iba a salvar a Emily. Para Lauren, era como ganar la lotería", ha relatado su madre.

Finalmente, el transplante fue un éxito y tanto Emily como Lauren se recuperan satisfactoriamente de la operación.