Los aviones que llegarán al país, de tipo Beriev Be-200 Altair, tienen capacidad para transportar hasta 12.000 litros de agua, y llegarán a la base aérea de Monte Real en Leiria. Estarán disponibles para participar en las operaciones contra incendios a partir de mañana.
El envío de estos aviones anfibios llega después de que las autoridades portuguesas pidieran ayuda a Rusia, en virtud de un acuerdo bilateral de protección civil en un acuerdo firmado en 1998 entre ambos países.
Los Beriev se unen a otras cinco aeronaves que han aportado en los últimos días distintos países para reforzar el dispositivo nacional que combate cientos de fuegos activos en el país, especialmente en el tercio norte. Este miércoles el Gobierno portugués solicitó ayuda formal a los socios europeos a través del mecanismo europeo de protección civil.
Al menos cuatro personas han muerto, 300 han resultado heridas en el grave incendio desatado en Funchal, la capital del archipiélago de Madeira. El incendio comenzó el lunes en los arrabales de Funchal y se propagó rápidamente.