Rusia se suma así a Alemania como garante de un acuerdo que ambos países entienden como imprescindible para garantizar la seguridad regional.
Por ello, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha advertido de que la disolución de un pacto que incorpora a Irán al mercado internacional "dañaría la atmósfera de predecibilidad, estabilidad y no proliferación en el mundo entero", de acuerdo con declaraciones recogidas por la agencia oficial de noticias rusa, RIA Novosti.
Si Trump decide deslegitimar el acuerdo, el Congreso republicano de Estados Unidos tendrá 60 días para ratificar su retirada del pacto, a pesar de que Naciones Unidas ha verificado en múltiples ocasiones que la república islámica está cumpliendo con su parte del acuerdo.
El Gobierno iraní ha lamentado profundamente el giro adoptado por Trump respecto a su predecesor, Barack Obama, y ha asegurado que seguirá cumpliendo los preceptos del tratado, tal y como ha repetido el presidente iraní, Hasan Rohani.