"Si la Administración de Estados Unidos lo considera apropiado, estamos dispuestos a proporcionar al Senado y al Congreso estadounidenses la transcripción de las conversaciones entre Lavrov y Trump", ha dicho Putin en Sochi, en una comparecencia junto al primer ministro italiano, Paolo Gentiloni. El presidente ruso ha matizado a continuación que sólo dará este paso si Washington quiere, "por supuesto", según la agencia Sputnik.
Un asesor de Putin, Yuri Ushakov, ha aclarado que Rusia no tiene ninguna grabación del encuentro, pero sí recogió por escrito los detalles del diálogo. Según varios medios norteamericanos, Trump dio a Lavrov información clasificada, si bien desde la Casa Blanca se ha insistido en que la conversación fue "completamente apropiada".
Putin ha bromeado y ha dicho que Lavrov no le transmitió ni a él ni a los servicios de Inteligencia la supuesta información secreta. "Muy mal, necesito darle una reprimenda", ha ironizado el mandatario ruso, que ha vuelto a atribuir la última polémica a la "esquizofrenia política" que ha cundido en Estados Unidos tras el ascenso de Trump.
El presidente de Rusia ha advertido de que quienes lanzan este tipo de acusaciones contra el inquilino de la Casa Blanca son "o estúpidos o peligrosos", en la medida en que considera que perjudican a Estados Unidos. "Al principio, seguimos los acontecimientos como una lucha política interna, (...), ahora nos preocupa porque quienes generan este sinsenstido, pueden generar un sinsentido aún mayor", ha apuntado.